Aceite de oliva muy frutado que recuerda el sabor de la aceituna, con algunos matices de sabor a otros frutos como la manzana, el plátano, la almendra y el recuerdo de la hierba recién cortada. Su comportamiento en la boca es largo, dulce y suave, dejando al final un ligero sabor amargo propio del fruto del que procede. "Olivar de la Luna" es un aceite de gran estabilidad y alto contenido en vitamina e. este aceite de oliva virgen en rama de Pozoblanco (Córdoba) es un coupage de las variedades nevadillo blanco, lechín, picudo, manzanilla. Sus notas de cata son frutado medio, amargo ligero y picante ligero. en crudo: ensaladas, tostadas, para realzar el sabor de un buen pescado o carne a la plancha.